Las interrupciones prolongadas del suministro eléctrico pueden interrumpir o detener los servicios esenciales proporcionados por la sociedad. Los hogares deben estar preparados para gestionar de manera independiente durante al menos 72 horas bajo tales condiciones. Se recomienda almacenar suficiente comida, agua y medicamentos para este período. Además, es crucial contar con conocimientos básicos de preparación, como saber cómo acceder a la información durante las interrupciones y cómo mantenerse caliente en una casa que se enfría.
La preparación autosuficiente de los hogares apoya la resiliencia de la sociedad y ayuda a las personas a afrontar situaciones difíciles. Por esta razón, se recomienda que cada persona asuma la responsabilidad de su propia preparación en caso de emergencias.